Oare es el nombre de una base de datos medioambientales creada por la ONU en colaboración con la Universidad de Yale con el objetivo de servir de información tanto a Organizaciones no gubernamentales como a universidades o instituciones públicas y otros organismos de países en vías de desarrollo.
Tal y como comenta Achim Steiner, director ejecutivo del Programa de las Naciones Unidas para el Medioambiente, «Sin un acceso justo a la información y sin la capacidad de negociar de igual a igual los acuerdos fundamentales por parte de los países en vías de desarrollo, no progresaremos adecuadamente». El acceso a dicha base de datos se obtiene en función en el PIB por habitante de cada país. Si el PIB de un país está por debajo de los 1000 dólares anuales, el acceso es gratuito, si se encuentra entre 1000 y 3000 dólares americanos anuales, se debe pagar una módica cantidad para acceder a la información.
Camerún, donde el presupuesto para la documentación del Centro para el Medioambiente y el desarrollo es de 3.500 euros anuales, es un ejemplo de la utilidad de esta herramienta. Este centro, que cuenta entre sus miembros con economistas, politólogos y juristas, está abonado a la base de datos desde hace dos años. Según comenta su director, Samuel Nguiffo, “Aquí, incluso las mejores universidades llevan un retraso acumulado causado por la dificultad de acceder a la información.
Gracias a OARE podemos saber lo que está ocurriendo en el ámbito científico y medioambiental, podemos conocer cualquier fenómeno antes de que nos alcance. Tenemos acceso a una documentación que, de otra forma,nos resultaría inaccesible. Mediante Oare, tenemos acceso a una documentación científica de calidad y actualizada. Antes debíamos contentarnos con una información en ocasiones caducada o, en todo caso, pagar cantidades inaccesibles para nosotros para conseguirla. En muchas ocasiones, nuestra fuente de información se limitaba a las fotocopias de artículos que alguno de nosotros realizaba durante sus viajes al exterior”.