El mercurio es una sustancia neurotóxica que está presente en todos los eslabones de la cadena alimentaria y representa un grave peligro para los fetos y los niños de corta edad.
El pasado 23 de octubre, los gobiernos del mundo entero dieron un paso significativo para establecer un tratado vinculante en la lucha contra la contaminación debida a esta sustancia.

Entre los puntos más relevantes se encuentran la definición de protocolos que permitan la participación de ONGs en las discusiones y una agenda precisa que fije el plazo de adopción del futuro tratado en 2013.
Por otra parte, las ONGs de protección medioambiental y de la salud han recordado su solicitud de que se excluyan los materiales medicinales que contengan mercurio, expuesta a raíz de la publicación de un informe de la Comisión Europea en el que se recomendaba la sustitución inmediata de esos productos.