Existen en el mundo más de 3.500 millones de usuarios de teléfono móvil. Estos móviles funcionan gracias a las ondas que viajan por el aire, por lo que es de pura lógica concluir que dichas ondas electromagnéticas también estarán afectando al lector de este artículo en este preciso momento. Esa es la premisa del director palestino-estadounidense Talal Jabari, cuya primera obra Full Signal (Cobertura Total) trata sobre los peligros ocultos de las omnipresentes ondas electromagnéticas.
Desde la aparición de los sistemas de telefonía GSM, un número creciente de antenas de móvil modela el paisaje de muchos barrios y pueblos del mundo entero para asegurar el servicio a los cada vez más numerosos usuarios de teléfono móvil. De hecho, estas antenas son tan prolíficas que en algunos lugares del mundo se hacen invisibles en el paisaje, con la misma sutileza con que los automóviles aparcados son invisibles en las calles. Y las que no dejan de ser visibles por su cotidiana presencia se esconden en chimeneas y campanarios o se disfrazan de astas de bandera, árboles y de los más variados recursos paisajísticos. Sin embargo, a pesar de que existen numerosas personas que sufren de electrohipersensibilidad (una alteración de los mecanismos de regulación biológica que padecen las personas sometidas una fuerte exposición a campos eléctricos o electromagnéticos y que, según la OMS, afecta a 1-3% de la población), no se está aplicando el principio de precaución. Según algunos expertos, estamos formando parte de un experimento biológico a gran escala que podría tener consecuencias desastrosas para la salud pública.
No sabemos nada sobre los efectos a largo plazo que las tecnologías de la telefonía móvil pueden causar sobre nuestra salud. Sin embargo, vivimos expuestos a una enorme radiación electromagnética que, al ser invisible, no se considera como contaminación.
El documental Full Signal habla con científicos del mundo entero que están investigando los efectos que la tecnología de la telefonía móvil tienen sobre la salud, con periodistas veteranos que llevan décadas llamando la atención sobre el tema, con abogados y legisladores que representan a quienes desean que las antenas queden reguladas. Asimismo, el documental nos lleva a una aldea en Palestina donde la población, tras comprobar el enorme aumento del número de casos de cáncer en las viviendas situadas más cerca de las antenas, logró erradicarlas de sus azoteas. Full Signal, rodada en diez países y seis estados norteamericanos, muestra una vez más cómo los intereses económicos pasan por encima de la salud pública. El documental propone que seamos los usuarios quienes tomemos la responsabilidad de utilizar menos los teléfonos móviles y de informarnos acerca de los peligros de las ondas electromagnéticas.
Full Signal (Full Signal cuenta con subtítulos en español.)
6 Comments
Oikos
Un reportaje excelente; mas hemos observado un error en el número de usuarios en vez de 3500 millones de usuarios debería poner 3500 billones de usuarios, o sea, en inglés mil millones 1 000 000 000 en español un millón de millones 1 000 000 000 000 Muchas gracias por la difusión.
Regina Silva
Que ironia o Lay Out é propaganda bancária.
Regina Silva
propaganda de telefones móveis, smarts,…, chips. O que dizer disto? A inteligencia associada
Charly
Regina, conoces Triodos Bank?? Si lo conoces, de acuerdo, si no, deberías conocerlo
Oikos
El comentario anterior està equivocado. Si hay 7.000 millones de habitantes, sí que es cierto que son 3500 millones de usuarios, en el 2009. Mil perdones.
alberto
Felicitates por este documental y espero seamos capas de detener esta epidemia aunque es muy dificil por que estamos encontra del pulpo capitalista al que personas que reclaman justicia estorvan